El objetivo es reducir el cambio climático, proteger la biodiversidad y luchar contra la desertificación.
El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) alertó del aumento mundial de enfermedades infecciosas relacionadas con la salud de los ecosistemas
PNUMA se ocupa de cuatro áreas:
La actividad humana ha alterado casi un 75% de la superficie terrestre empujando a la flora y fauna silvestre a un rincón del planeta.
Los bosques son importantes para el mantenimiento de la vida en la Tierra y desempeña un papel fundamental con la lucha contra el cambio climático.
La inversión en la restauración de la tierra es crucial para reducir vulnerabilidades y riesgos para economía. La salud del planeta desempeña un papel importante en la aparición enfermedades zoonóticas que se transmiten entre animales y humanos.